El pago de las amortizaciones de capital a los organismos multilaterales en los últimos años ha sido un rubro importante de desaceleración de la economía de la region Latino Americana y del Caribe, esto ha traído como consecuencia que la situación fiscal se vea totalmente deteriorada.

El nivel de endeudamiento de los gobiernos de toda la región en general, ha aumentado en promedio hasta casi un 80% en relación al Producto Interno Bruto PIB en el año 2021, lo que convierte a América Latina y el Caribe en la región en vías de desarrollo, más endeudada del mundo, porque la relación de la deuda comparada con todas las exportaciones es del 57%, según lo afirmó Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de las Naciones Unidas.

El informe de Alicia Bárcena, plantea dos retos que son complementarios el uno con el otro, el primero que es a corto plazo, recomienda incrementar el gasto público para atender a grupos vulnerables, como son: los segmentos de ingresos bajos y las personas mayores de 65 años.

Esto permitiría sostener el consumo de estas personas y sus familias, que por ahora no tienen ingresos y sería necesario dotarles de una renta básica temporal, financiada por el Estado, que a la final, parte importante de estos bonos, pueden volver a la caja fiscal, a través de impuestos pagados por la compra y venta repetitiva de productos que pagan el impuesto al valor agregado.

El segundo a mediano y largo plazo, es promover política anticíclicas para aumentar el empleo y mantener un crecimiento adecuado. Para esto también es necesario ampliar el gasto público hacia créditos destinados a la transformación productiva.

El margen para aplicar políticas se puede aumentar si se eliminan la elusión y la evasión fiscales, y se hace caer el peso de la tributación en los impuestos directos y los que gravan la propiedad y el patrimonio.

También se puede dirigir el gasto público hacia la creación de empleos que logren transformaciones ambientalmente sostenibles apoyando a las pequeñas y medianas empresas (pymes), la inclusión digital y el desarrollo de tecnologías verdes”, concluye este estudio.