Cada una de las criptomonedas tienen una forma particular de funcionamiento, la forma de minar de cada una cambia según el sistema que utiliza y depende también de la cadena de bloques y su algoritmo. A pesar de estos detalles, todas tienen algo en común: necesitan de los mineros para operar y mantener la seguridad de la red. Su trabajo es tan importe, que a los mineros se les paga por su trabajo. En caso del bitcoin y otras criptomonedas similares, cada vez que se mina y se encuentra un bloque que el sistema lo cataloga como válido, el minero cobra 12,5 bitcoins.  El minero recibe el pago con la misma moneda que encuentra, y es en ese mismo momento, que entran en circulación esas 12,5 monedas.  Anteriormente se creía, de manera errónea, que la minería de criptomonedas consistía en generar nuevas monedas y la verdad es que todas las criptomonedas se encuentran previamente definidas y lo único que hace la minería es que entren en circulación.

Los bitcoin y muchas otras criptomonedas, han ingresado al mundo y se encuentran en plena vigencia desde hace más de doce años. En esta ocasión, vamos a hablar solamente de bitcoin y su tecnología, para que nos sirva de base para un mejor entendimiento, ya que existen muchas  criptomonedas que funcionan de una manera distinta y sería muy complicado abarcar una explicación en un solo momento.

Bitcoin es un activo desarrollado por un grupo de personas anónimas, a través de una tecnología denominada «blockchain».  La principal función de esta tecnología es mantener protegidas las criptomonedas que se encuentran escondidas detrás de algoritmos pre-establecidos. Estos algoritmos son claves alfanuméricas únicas, que tienen que encontrarse de una forma ordenada y en un momento preciso por medio de ordenadores super potentes, ya que si una clave es encontrada fuera de tiempo, no es considerada como válida y el sistema se desentiende y sigue buscando la clave precisa.

Al principio el algoritmo está diseñado para que se puedan encontrarse las claves rápidamente y se vayan liberando o apareciendo muchas monedas digitales. Pero después de cierto tiempo, el sistema incrementa la dificultad y hace que el encontrar monedas sea más complicado, y además, cada vez existen menos claves disponibles, lo que dificulta aún más su aparición.

Los precios de las criptomonedas suben y bajan en razón a la especulación.  Las criptomonedas tienen precio, porque se espera que algún momento sea usada como un medio de pago o como una moneda de circulación normal y legal. Todavía esto no sucede del todo, pero en realidad falta poco para eso.  Debes conocer, que a pesar de que han pasado más de doce años desde su aparición, muchas personas todavía no las conocen y su potencial todavía es indeterminado.  Por eso es que su usabilidad es muy pequeña y básicamente se utiliza para intercambiar una moneda por otra.

Primero que todo, la inestabilidad en el valor de las criptomonedas son todavía un problema. El tener alta volatilidad, hace que muchas personas quieran ingresar en este mundo, para ganar dinero a través de la especulación. Claro, si hoy compro 100 y mañana tengo 200, es un gran negocio, pero muchas otras personas, no quieren saber del tema, porque no les gusta tomarse riesgos, ya que las cotizaciones de las criptomonedas pueden en un día subir tranquilamente un 50% y al día siguiente bajar un 80% y es a esto lo que un inversionista de criptomonedas puede estar expuestos.

Como decíamos, su uso todavía no está claro, pero a pesar de esto, bitcoin ya se encuentra cotizando en la bolsa de Nueva York y algunos bancos del mundo, están realizando inversiones en bitcoin. De hecho, se dice que más del 60% de los bitcoins en circulación, está en pocas manos y sobre todo están en los portafolios de entidades financieras. Varias plataformas de trading también tienen bitcoin y permiten su compra y venta. Los traders son los primeros en estar contentos con su aparición, porque las grandes volatilidades, permiten ganar dinero en cortos períodos de tiempo.

Los jóvenes durante la cuarenta del COVID 19, entraron a Internet a aprender de finanzas, a bajar y descargar a sus celulares, plataformas de trading y aprendieron sobre inversiones. Al principio compraban y vendían criptomonedas como si fuera un tema de apuestas, mientras aprendían a invertir en el mercado de valores, pero de todas maneras debían tener mucho cuidado, porque las criptomonedas están lejos de ofrecer una renta fija.

Las criptomonedas no son seguras, igual cuando te ofrecen un activo de alto potencial, siempre vienen acompañados de riesgos importantes, por lo que no deberías arriesgar más del 15% de tu capital disponible para invertir cuando existe alto riesgo.  No estamos hablando de arriegar propiedades inmuebles, tampoco propiedades muebles y tampoco estamos hablando de dinero de uso corriente o familiar.  Se llama capital de riesgo y no deberías invertir más del 15% de ese capital en este tipo de activos, porque tienen un perfil muy especulativo. Debes recordar que las criptomonedas, si bien son un activo digital, los demás activos que se negocian en las bolsas de valores, también son digitales.  Por ejemplo, cuando compras Oro, plata, petróleo, etc., no recibes piezas de oro, lo que estás haciendo es una especulación para poder ganar dinero en un tiempo determinado y siempre debes estar atento para evitar pérdidas si la operación es negativa.